En un vapor de carga,
cansado de mi buena suerte,
me marcho a conocer otra ciudad,
allí donde las calles
rebosen simpatía,
parezcan que jamás van a acabar
He pensado que es mejor así,
de otra forma ya no sé vivir sin ti
Cualquier día de éstos
volverás a saber de mí;
hasta entonces descuida mi vida
y olvida esta vida
Por ti por siempre,
de corazón
Después de tantos años
y de tantos contratiempos
en el cielo de mi mente sigues tú,
tú eres la estrella permanente
que mantiene aún latente
la esperanza de algún día ser feliz